La Vega del Guadalquivir se ha declarado por parte del Gobierno Central como zona estratégica por los planes energéticos junto a otras de la provincia como el Alto Guadalquivir y la Campiña. Se trata de un territorio delimitado entre los términos de Guadalcázar, Posadas y Almodóvar del Río y a lo largo de 15 kilómetros desde la cuenca del Arroyo Guadalmazán en La Fuencubierta y hasta su desembocadura. Aquí se quieren poner en marcha una serie de instalaciones industriales solares, líneas de evacuación soterradas y aéreas en caminos públicos, o estaciones de seccionamiento que ocuparían 1.218 Hectáreas.
El Ayuntamiento de Guadalcázar ha sido uno de los primeros en alzar la voz en contra de estos proyectos. Según ha explicado el alcalde, Francisco Estepa, “nos oponemos al proyecto que hay presentado en una zona próxima al municipio”. El regidor recuerda que la competencia para los permisos la tiene la Junta de Andalucía y el ayuntamiento “lo único que ha dado de momento es un informe de compatibilidad emitido por el arquitecto municipal”.
Desde el consistorio se han querido unir al malestar de las distintas voces que en estas últimas semana se han alzado en contra de estos proyectos como SOS Guadalcázar o la PCAEH, y ha adelantado que se está “trabajando con todos los argumentos a nuestro alcance para que no se ubique en una zona que implicaría un gran impacto visual y las consecuencias para el paisaje flora y fauna en esa zona”. Estepa es rotundo “apostamos por las energías renovables pero en zonas que no generen tal perjuicio” y aclara que su oposición tiene que ver con los proyectos “que suponen impacto visual y consecuencias para la flora y la fauna”.
El alcalde recuerda que en estos últimos días un grupo vecina denominado ‘SOS Guadalcázar’ han denunciado precisamente la concentración y el sobredimensionamiento de más de una decena de proyectos fotovoltaicos en esta zona, todos ellos avanzado y en distintas fases burocráticas. Según denuncia la entidad se perjudicaría de manera grave a las últimas dehesas de la comarca y zonas de labor dedicadas al olivar y otros cultivos.
A esto se suma que en estos lugares existen especies de fauna y flora escasa y protegida por ley y se refieren a alzacolas, aguilucho cenizo, cernícalo primillas, carracas y sisones hasta especies vegetales catalogadas como vulnerables en las listas rojas nacionales.
Desde el Ayuntamiento se hace referencia también a otro grupo que ha presentado alegaciones a estos proyectos solares como es la Plataforma de Conservación de las Aves Esteparias y sus hábitas. La PCAEH prepara alegaciones a varios proyectos solares que consideran trasformarían el paisaje de la zona lo que supone la pérdida un hábitat único de la provincia de Córdoba, un paisaje sin igual, y una parte de nuestra historia y de nuestra cultura. A lo que se suma el valor para las aves esteparias de la zona.
Y es que nuestra zona cuenta con muchos enclaves catalogados dentro del Plan de Conservación de Aves Esteparias de Andalucía como zonas de importancia para las aves esteparias (ZAPRAE) e incluso del Plan de Conservación de Aves Necrófagas, contando por lo tanto, con especial interés para la conservación de especies y hábitats.
Por último, subraya el alcalde de Guadalcázar un grupo de expertos de la Sociedad Cordobesa de Historia Natural (SCHN) publicaba que en una sola jornada de campo se habían localizado 373 especies de animales y plantas, en diversos enclaves del término municipal de Guadalcázar.
Uno de los animales que se destacan por estar amenazado y protegido es un insecto, concretamente una mantis religiosa sin alas (Apteromantis aptera), que se ha localizado en “la Dehesilla” y también en el parque periurbano El Hecho.
Esta especie aparece incluido en la categoría Vulnerable tanto en el Libro Rojo de los Invertebrados de Andalucía como en el de España, y además se encuentra recogido en el Listado Andaluz de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, instrumento derivado de la Ley 8/2003 de la Flora y Fauna Silvestre de Andalucía y desarrollado en el Decreto 23/2012 por el que se regula la conservación y el uso sostenible de la flora y fauna silvestres y sus hábitats, concluye el alcalde haciendo referencia a varias publicaciones en prensa en este sentido.